Al mostrar tu interés por vivir esta experiencia estás apoyando el sueño de vida de tus anfitriones, a bordo la tripulación será la encargada de la seguridad, la limpieza, las comidas y la ruta. El confort en un velero es diferente de un hotel o una casa, pero tiene otras muchas ventajas que cambiarán tu forma de ver la vida.
La manera que tengas de participar una vez a bordo es algo muy personal, si te apetece siempre puedes ofrecerte para colaborar o preguntar las curiosidades de la vida en el mar, pero sobre todo y lo ideal es que confíes plenamente en el criterio de la tripulación para proponer la ruta y que te mantengas siempre curioso y respetuoso con esta otra forma de vida, muy diferente a las rutinas y prioridades de la vida en tierra. Si no entiendes algo ¡pregunta! Si tienes alguna crítica ¡ habla con tu tripulación! Ellos harán todo lo posible por acompañarte en tu adaptación por la vida en el mar.